La Consciencia y el Autocuidado.

Es innegable que las nuevas generaciones de jóvenes universitarios traen un ímpetu y unas ganas intensas de vivir al máximo su vida, lo cual para nada se escucha problemático, por el contrario están en su derecho y poseen la libertad de decidir sobre su propia vida.  Sin embargo en mi experiencia en la consulta terapéutica, he podido constatar algunos aspectos que me gustaría compartir contigo a fin de que tengas más elementos para decidir lo que sea mejor para ti, te los presentaré con el razonamiento que los jóvenes exponen y que respalda la decisión de sus actos:

 1. Eso jamás me va a pasar a mí: Una frase muy común entre los jóvenes cuando otra persona le comenta sobre lo que vivió alguien más, inmediatamente mencionan que eso para nada les pasaría a ellos, sin embargo y desafortunadamente en cualquier momento los jóvenes viven experiencias en las que se exponen a tal grado que las consecuencias son inminentes, tal es el caso de las siguientes situaciones:

a) Embarazo no deseado.

b) Tener algún accidente por manejar en estado de ebriedad.

c) Desarrollar una adicción al alcohol y/o a las drogas.

d) Contagio de enfermedades de transmisión sexual.

A todos a quienes les ha sucedido esto, jamás se imaginaron que les podría pasar a ellos y hoy sufren y tienen que afrontar las consecuencias, muchas veces trágicas o que te cambian la vida para siempre.

 2. Es mi vida y yo decido con quien salgo y me relaciono: Es claro que la frase por sí misma es verdad y es parte de nuestra capacidad de libre albedrío que nos fue otorgada con los derechos de ser humano, sin embargo si no toman en cuenta sus necesidades de dependencia o codependencia emocional, terminarán en situaciones como las siguientes:

a) Mujeres codependientes en relaciones con personas alcohólicas o drogadictas.

b) “Amiga o amigo con derechos” los cuales son literalmente usados y abandonados cuando ya no se les requiere de “sus servicios” y que rara vez la relación prospera a una relación formal de noviazgo  porque jamás toman en serio a la persona.

c) Mujeres y hombres en relaciones con celos obsesivos, relaciones violentas, absorbentes y asfixiantes en lo emocional. De los cuales si se separan son capaces de amenazar hasta de quitarse la vida o asesinar a la pareja si terminan la relación.

d) Relaciones con personas casadas con la promesa de que pronto dejarán a su esposa y que en realidad nunca sucede y mientras son sometidas al antojo de quien las utiliza.

e) Caer en Depresión por perder el gusto y sentido de la vida, lo que puede llevar incluso a intentos o consumar el suicidio.

Y lo grave del asunto es que tardan tiempo en hacer consciente la situación y cuando lo hacen o están atrapados en con sentimientos encontrados o ya es tan tarde que los daños personales son irreversibles.

3. Debo vivir mi vida como si fuera el último día: Como puedes observar también  esta frase por sí misma es inofensiva, sin embargo en el contexto actual de los jóvenes su vulnerabilidad les hace caer en excesos, por ejemplo:

a) Pareciera que hay que pasar lista en el antro jueves, viernes y sábado, lo que les trae problemas económicos y de rendimiento escolar por las desveladas continuas

b) El tomar se vuelve una competencia para romper el récord de  cada semana ingerir más.

c) Tener relaciones sexuales a edades más tempranas porque ya “todos” lo hicieron.
   

d) Compartirse sexualmente cada vez que se sale al antro, siempre y cuando le tomen “confianza” a la persona que acaban de conocer, lo que resulta un gran riesgo en todos los sentidos por la inseguridad y delincuencia actual.

e) Entregarse a una relación sexual casi inmediatamente de que formalizan el noviazgo porque para ello ya son novios.

En todos los casos anteriores el problema no está en la convivencia y la diversión de fin de semana, tampoco está en la decisión de vivir responsablemente nuestra sexualidad, el problema está en los excesos. Que salgas de “reventón” es hasta necesario, pero no que termines reventado en pedazos por algún accidente o con pérdida de la consciencia por congestión alcohólica, la idea es vivir la vida con el mayor disfrute posible, pero no poniendo en riesgo tu integridad y dignidad, ¡¡¡si tú no te tomas en serio nadie lo hará por ti!!!. Se sabe que en ocasiones esa conquista de la mujer guapa es el gancho para secuestros o asaltos con violencia. Cuando se vive con excesos literalmente puede ser que en un momento dado vivas “el último día de tu existencia”

Así que la idea no es encerrarte en tu casa y no vivir y disfrutarla, el punto es aprender los siguientes aspectos de ti y que seguro ayudarán en tus técnicas de Autocuidado:

1. Aprende a conocerte más: El conocerte a ti mismo con tus necesidades emocionales y personales te ayudará a no engancharte ni con personas nocivas ni con substancias adictivas que te producen satisfacciones momentáneas pero limitan tu desarrollo, madurez y bienestar personal.

    2. Trata de mejorar tu nivel de conciencia,  pensando con detenimiento cada instante de tu vida y valora las posibles consecuencias, lo que te ayudará a tomar mejores decisiones.
    3. Desarrolla y maneja límites personales que garanticen que no te excederás en lo que pueda lastimarte, aprender a no dejar que te lastimen  y también para no lastimar a nadie más.
    4. Crea grupos de amigos donde se cuiden unos a otros, la amistad verdadera impide que salgas perjudicado en cualquier aspecto de tu vida, se divierten con mayor tranquilidad, aprenden a quererse y respetarse entre sí, adquieren medidas de seguridad que mantienen la integridad de todos. Se hablan abiertamente de los riesgos y se aprende a escuchar mejor a las personas.
    5. Aprende a quererte, definitivamente el aspecto más importante de todos es que aprendas a aceptarte y quererte con todo lo que tú eres para que a nadie le des permiso de afectar tu integridad y valor personal, ni a ti mismo te des esa oportunidad.

Así que ahora tienes más información y lo que sigue depende de ti.

¡¡¡Has Consciencia y Cuídate mucho!!!

Lic. Jorge Castorena Martínez.

Dir. del Desarrollo del Potencial Humano.

Universidad de León.